No es novedad que Argentina vive tiempos complicados. Las turbulencias económicas se han convertido en una variable casi normal para el país, con una historia de crisis cíclicas que parecen repertirse una y otra vez. Los argentinos saben que es una devaluación y la pérdida de valor del Peso Argentino contra el Dólar norteamericano. Pero de a poco, cada vez más gente está encontrando otra alternativa al Peso Argentino. Y entonces surge la pregunta: ¿Qué ventajas tiene el Bitcoin sobre el Peso argentino?
Podríamos comenzar hablando sobre las propiedades del dinero: escasez, durabilidad, divisibilidad, fungibilidad, portabilidad, reconocibilidad. Pero más allá de estas características que se estudian en los claustros académicos, las fortalezas de Bitcoin demuestran que su potencial está muy por arriba de la moneda fiat de. Entonces, analizaremos aquí, algunas propiedades del Bitcoin, que lo hacen más atractivo que el dinero fiduciario argentino.
Seguridad: Bitcoin es más que una moneda. Podría decirse que es todo un sistema monetario. Pero, a diferencia del dinero fiduciario, la seguridad está sustentada en criptografía, y en la tecnología blockchain en que se apoya. Cuenta con características propias de cifrado de clave pública y clave privada. Al ser un sistema descentralizado es más resistente a ataques informáticos.
Descentralización: Bitcoin no es una moneda emitida por ninguna institución central que responda a intereses personales, gubernamentales o corporativos.
Cantidad limitada: ¿Cuántas veces se ha escuchado en Argentina a economistas y periodistas hablando del problema de la emisión monetaria? Y lo que es peor, algunos siguen sosteniendo que emitir más pesos argentinos podría ser una solución. Podemos ver que con el Peso Argentino hay entonces una cantidad ilimitada, lo que puede significar gran inflación y pérdida de valor. Pero, en el caso del Bitcoin la historia es diferente, pues al estar su cantidad limitada a 21 millones, el precio del Bitcoin siempre tenderá a ir hacia arriba conforme suba su demanda, pues la oferta de cantidad de monedas siempre será la misma.
Confianza: La gente que no conoce al Bitcoin suele preguntar en qué está respaldado, como si el Peso Argentino tuviera algún tipo de respaldo. Y aquí es donde se puede ver una especie de paradoja. La confianza del Bitcoin existe porque no hace falta confiar en ningún gobierno, organismo o institución que esté detrás. La red de Bitcoin tiene una arquitectura de libro distribuido que permite a los usuarios, no depender de terceros para que cuiden su dinero. Aquí hay un punto a tener en cuenta. En el sistema tradicional las instituciones bancarias guardan el dinero de los ciudadanos con la promesa que devolvérselo cuando ellos dispongan. Pero, ¿cuántas veces esto se ha inclumplido en Argentina? Basta con recordar los tiempos de confiscación de depósitos o de "corralito". Bitcoin muestra aquí una clara ventaja, ya que el usuario se convierte en su propio banco (claro que eso también implica una responsabilidad)
Trayectoria: Cuanto más tiempo un bien sea percibido como valioso por la sociedad, más grande será su atractivo como resguardo de valor. Se podría decir que Bitcoin aún no tiene una trayectoria importante, pero si pensamos que es una tecnología que nació hace once años, ya no podemos decir que sea una tecnología nueva. Y la cantidad de usuarios sigue en ascenso. La trayectoria se va haciendo cada vez más seria. Bitcoin tiene resguardo con un historial extenso y establecido, y difícilmente sea desplazado por uno nuevo.
Imposibilidad de falsificación: Cualquier moneda fiduciaria convencional del mundo (aquí podemos incluir el dólar, el euro, peso, etc.) puede falsificarse, con los riesgos que ello implica para su tenedor. Bitcoin, en cambio, no puede ser falsificado, lo que lo posiciona en una situación de privilegio frente a otras formas de dinero.
Resistencia a la censura: Esta característica es fundamental, y posiblemente sea una de las mejor llega a ser entendida por los argentinos. Es una fortaleza que pone a Bitcoin a salvo en cuestiones que tienen que ver con la vigilancia masiva y también con decisiones arbitrarias, políticas o interesadas. La resistencia a la censura implica cuán difícil es para una organización externa como un gobierno o una empresa, impedirle al dueño de Bitcoin que pueda usarlo con libertad. Implica también que ningún gobierno o empresa puede cambiar las reglas del juego del sistema. Algo que sí es común en el sistema monetario argentino.
